Doi: http://dx.doi.org/10.13157/arla.64.2.2017.ra3
Autores: Raphaël MUSSEAU, Sonia BESLIC y Christian KERBIRIOU
E-mail: r.musseau@biosphere-environnement.com
Publicado: Volumen 64.2, Julio 2017. Páginas 325-345.
Idioma: Español
Palabras Clave: dieta, gasto energético, gestión de la zona costera, paseriformes de pantanal, muda, rango de hogar y recursos tróficos
Resumen:
Las especies
especialistas de costas tienen unas áreas de distribución naturalmente
restringidas y pueden ser afectadas drásticamente por la fragmentación y la
pérdida de sus hábitats, debido a los cambios antropogénicos actuales
(artificialización, erosión costera, aumento del nivel del mar o colonización
por especies invasoras). En este contexto, caracterizamos las estrategias de
colonización de un ave endémica de la costa atlántica francesa: Cyanecula svecica namnetum. Nuestro
estudio se enfoca en un periodo clave del ciclo vital de esta especie: la muda
posnupcial. Sesiones de captura y recaptura nos han permitido recuperar en
áreas intermareales un 26% de los nidificantes locales durante el periodo de
muda. El modelado de la cinética de muda reveló que la muda de las plumas de
vuelo requiere de 37 a 50 días. Un radio-seguimiento de las aves en muda reveló
(1) que los individuos explotaban tanto las formaciones vegetales más bajas
como las más altas y (2) que mostraban áreas de campeo pequeñas (0,42 a 1,34
ha) típicas de zonas donde los recursos tróficos tienden a ser abundantes y
predecibles. El análisis de excrementos destacó que las presas que contribuyen
más a la biomasa consumida por la especie pertenecieron a Coleoptera, Aranea y crustáceos
marinos (Amphipoda), estos últimos fueron particularmente seleccionados por
aves en muda activa. Nuestros resultados subrayan la importancia de los
humedales intermareales en términos de oportunidades tróficas para compensar
los gastos energéticos de la muda en el ruiseñor pechiazul. Dado los cambios
globales que ya están afectando dramáticamente los hábitats costeros,
enfatizamos que debería prestarse una atención especial a la conservación de
los humedales intermareales para las aves de marisma amenazadas, como el
ruiseñor pechiazul y que la restauración de las tierras continentales
adyacentes es una medida prometedora.